6 1Después de estas cosas, Jesús fue al otro lado del lago[787] Galilea, que también es llamado el Lago de Tiberias[788]. 2Una gran multitud lo seguía, porque habían visto los milagros que hizo con quienes estaban enfermos. 3Jesús subió a una montaña, y se sentó allí con sus discípulos. 4Ocurría que la Pascua, la fiesta de los Judíos, estaba cerca. 5Jesús entonces levantando sus ojos, y viendo que una gran multitud venía a Él, le dijo a Felipe, «¿Dónde vamos a comprar pan, para que estos puedan comer?» 6Esto lo dijo para probarlo, porque el mismo sabía lo que haría.
7Felipe contestó, «Doscientos denarios en pan no serían suficientes para que cada uno de ellos reciba un poco.»
8Uno de los discípulos, Andrés, el hermano de Pedro, le dijo, 9«Hay un niño aquí que tiene cinco panes de cebada[789] y dos pescados, pero ¿Qué es esto para tantos?»
10Jesús dijo, «Hagan que la gente se siente.» En ese lugar había mucho espacio en el pasto. Así que los hombres se sentaron, quienes eran alrededor de cinco mil. 11Jesús tomó los pedazos, y habiendo dado gracias, comenzó a distribuirlos a los discípulos, y los discípulos a los que estaban sentados[790]; de la misma forma con los peces tanto como ellos deseaban. 12Cuando estuvieron llenos, le dijo a sus discípulos, «Recojan los pedazos que quedaron, para que nada se pierda.» 13Así que los recolectaron, y llenaron doce canastos con los restos de las cinco tajadas, que habían dejado los que habían comido[791]. 14Entonces cuando la gente vio las señales que Jesús hizo, dijeron, «Este es verdaderamente el profeta que viene al mundo.» 15Entonces Jesús, percibiendo que iban a ir y tomarlo por la fuerza, para hacerlo rey, se retiró a la montaña. [792]
16Cuando se hizo noche, sus discípulos fueron al lago 17entraron al bote y fueron por el lago hacia Capernaum. Estaba oscuro y Jesús aún no había ido donde ellos. 18El lago era agitado por un gran viento que soplaba. 19Entonces, cuando habían remado cerca de veinticinco o treinta estadios[793] vieron a Jesús caminando sobre el lago, y acercándose al bote; y tuvieron miedo. 20Pero Él les dijo, «SOY YO. No tengan miedo.» 21Entonces deseaban recibirlo en el bote. Y de inmediato el bote quedó en tierra en el sitio al que se dirigían.
22Al día siguiente, la multitud que estaba al otro lado del lago vio que no habían más botes allí excepto en el que se habían embarcado los discípulos, y que Jesús no había entrado con sus discípulos en el bote, sino que ellos se habían ido solos. 23Sin embargo llegaron botes de Tiberia cerca al sitio donde comieron pan después de que el Señor había dado gracias. 24Entonces cuando la multitud vio que Jesús no estaba allí, ni sus discípulos, ellos mismos entraron en los botes, y fueron a Capernaum, buscando a Jesús. 25Cuando lo encontraron al otro lado del lago, le preguntaron, «Rabí, ¿Cuándo viniste aquí?»
26Jesús les contestó, «Con seguridad les digo, me buscan, no porque vieron señales, sino porque comieron pan y quedaron llenos. 27No trabajen por la comida que perece, sino por la comida que permanece en la vida eterna, de la cual el Hijo del Hombre les dará. Porque Dios el Padre se lo ha concedido.»
28Ellos entonces le dijeron, «¿Qué debemos hacer, para poder realizar los trabajos de Dios?»
29Jesús les contestó, «Este es el trabajo de Dios, que ustedes crean en aquel que Él ha enviado.»
30Entonces ellos le dijeron, «¿Qué señal haces para que podamos ver y creerte? ¿Qué obras realizas? 31Nuestros padres comieron mana en el desierto. Como está escrito, `Él les dio pan del cielo[794] para comer.´»
32Jesús entonces les dijo, «Con seguridad, les digo, no fue Moisés quien les dio pan del cielo, sino mi Padre da el verdadero pan del cielo. 33Porque el pan de Dios es quien viene del cielo, y da vida a este mundo.»
34Entonces le dijeron, «Señor, danos siempre de este pan.»
35Jesús les dijo, «Soy el pan de la vida. Quien venga a mi no tendrá hambre, y aquel que crea en mi nunca estará sediento. 36Pero ya les dije, que ustedes me han visto, y aún no creen en mí. 37Todos aquellos que mi Padre me de, vendrán a mí. A aquel que venga a mí de ninguna forma lo rechazaré. 38Porque he venido del cielo, no para hacer mi voluntad, sino la voluntad de quien me envió. 39Esta es la voluntad de mi Padre que me ha enviado, que de todos los que me ha entregado, no debo perder nada[795], sino resucitarlos el último día. 40Esta es la voluntad del que me envió, que todo el que vea al Hijo y crea en Él, tendrá vida eterna; y yo lo resucitaré el último día.»
41Entonces los Judíos murmuraron contra Él, porque dijo, «Soy el pan que bajó del cielo.» 42Dijeron, «¿No es este Jesús, el hijo de José, cuyo padre y madre conocemos? ¿Cómo entonces es que Él dice, `Yo he venido del cielo?´»
43Entonces Jesús les contestó, «No murmuren entre ustedes. 44Nadie puede venir a mí a menos que mi Padre que me envió, lo traiga, y yo lo resucitaré en el último día. 45Está escrito en los profetas, `Todos serán enseñados por Dios.´ Así que todo el que oiga del Padre, y haya aprendido, viene a mí. 46Nadie ha visto al Padre, excepto aquel que es de Dios[796]. Él ha visto al Padre. 47Con seguridad, les digo, [797] tiene vida eterna. 48Soy el pan de la vida[797]. 49Sus padres comieron el mana del desierto, y murieron. 50Este es el pan que viene del cielo[798], para que cualquiera pueda comerlo y no morir. 51Soy el pan viviente que bajó del cielo. Si alguien come de este pan, vivirá por siempre. Si, el pan por el cual le daré la vida al mundo es mi carne.»
52Entonces los Judíos discutieron unos con otros, diciendo, «¿Cómo puede este hombre darnos su carne para comer?»
53Así que Jesús les dijo, «Con seguridad les digo, a menos que coman de la carne del Hijo del Hombre y beban su sangre, ustedes no tendrán vida en ustedes mismos. 54Aquel que coma mi carne y beba mi sangre tiene vida eterna, y lo resucitaré en el último día. 55Porque en verdad mi carne es comida, y en verdad mi sangre es bebida. 56Aquel que coma mi carne y beba mi sangre vive en mí[799], y yo en él. 57Así como el Padre me envió, y yo vivo gracias al Padre; así mismo él que se alimente de mí, también vivirá gracias a mí. 58Este es el pan que bajó del cielo, no es como con el mana que nuestros padres comieron y murieron. Aquel que coma este pan vivirá por siempre.» 59Jesús dijo esto en la sinagoga, mientras enseñaba en Capernaum.
60Entonces muchos de sus discípulos, cuando lo escucharon, dijeron, «¡Estas son palabras fuertes! ¿Quién puede escucharlas?»[800]
61Pero Jesús sabiendo en su interior lo que los discípulos murmuraban sobre esto, les dijo, «¿Esto los perturba?[801] 62¿Cómo sería si vieran al Hijo del Hombre ascendiendo al sitio donde estaba antes? 63Es el Espíritu quien da vida. La carne no da ganancia alguna[802]. Las palabras que les digo son espíritu, y son vida. 64Pero hay algunos de ustedes que no creen.» Porque desde el comienzo Jesús sabía quienes eran, quienes no creían, y quien sería el que lo traicionaría. 65Él dijo, «Por esto les he dicho que nadie viene a mi, a menos que le haya sido dado por el Padre.»
66En esto, muchos de sus discípulos regresaron, y no caminaron más con Él. 67Entonces Jesús les dijo a los doce, «Ustedes no quieren irse, ¿O si quieren?»
68Simón Pedro le contesto, «Señor, ¿A quien iríamos? Tu tienes las palabras de la vida eterna. 69Hemos llegado a creer y sabemos que tu eres Dios bendito[803].»
70Jesús les contesto, «¿No los escogí a los doce? Y uno de ustedes
un demonio»
71Él hablaba de Judas, el hijo de Simón Iscariote,
porque este era el que lo traicionaría, y era uno de los doce.
[787] El original dice `mar.´
[788] Peshitta dice `de Tiberius.´
[789] WEB dice tajadas de cebada.
[790] En DieBibel dice `y los distribuyó a la gente,´ Peshitta y Elberfelder tienen el mismo sentido.
[791] Peshitta agrega `de las cinco tajadas de pan de cebada.´
[792] En WEB y Peshitta dice al final `por si mismo,´ en DieBibel dice `solo,´ en DiosHablaHoy dice `a lo alto de la montaña para estar solo.´
[793] 25 a 30 estadios corresponden aproximadamente de 5 a 6 kilómetros o de 3 a 4 millas.
[794] En Griego y Hebreo se usa la misma palabra para «cielo», «los cielos», «el firmamento» y «el aire.»
[795] En DieBibel dice `que no los deje yacer en tierra,´ en DiosHablaHoy dice `que yo no pierda a ninguno de los que me ha dado.´
[796] En DiosHablaHoy dice `que ha venido de Dios.´
[797] PeshittaWEBElberfelderDieBibelDiosHablaHoy
[797] En DiosHablaHoy dice `que da vida.´
[798] DieBibel dice `Pero no es así con el pan que viene del cielo: Cuando alguien de este coma, no morirá.´
[799] DiosHablaHoy dice `vive unido a mí.´
[800] En DiosHablaHoy dice `Esto que dice es muy difícil de aceptar; ¿Quién puede hacerle caso?´
[801] DiosHablaHoy y Peshitta dicen `¿Esto los ofende?´
[802] DiosHablaHoy dice `el cuerpo no aprovecha
[803] Elberfelder y DieBibel dicen `tu eres Dios bendito,´ Peshitta , WEB y DiosHablaHoy dicen `el Cristo, el Hijo del Dios viviente.´